¡Está en nuestra mano! ¡Elige tu motivo!

"Lo inteligente es usar la energía, no gastarla”, con este eslogan el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), en colaboración con el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, ha iniciado una campaña para concienciar a los ciudadanos de la importancia del ahorro de energía y de que "Los pequeños gestos son los que ahorran energía".

Todos sabemos que el cambio climático es la mayor amenaza ambiental del siglo XXI, por lo que es importante que cada uno asumamos nuestra parte de responsabilidad y comencemos a tomar medidas para ahorrar agua y energía en nuestros hogares, sin olvidar difundir este mensaje entre nuestros conocidos.

Durante las charlas de la Semana Europea de la Calidad, no hemos dejado de escuchar los conceptos “Responsaibilidad Social Empresarial”, “ecoinnovación”, “ecoetiqueta”, “ecodiseño”,… Sin embargo, corregidme si me equivoco, no recuerdo que en ninguna de las charlas se hablara de “Responsabilidad Social Personal” o de “ecociudadanos” ni de la importancia de cada uno de nosotros, y no sólo de las empresas, en el ahorro de energía y otros recursos como el agua. Por ello, y tras ver la nueva campaña que antes mencionaba del IDAE, he decidido escribir en el blog sobre este tema.

Estoy segura de que ya todos hemos oído hablar de ello, pero creo que no está de más recordar los pequeños consejos que además de ayudarnos a cuidar el medio ambiente ¡nos ayudarán a cuidar nuestra cartera cuando recibamos el recibo de la luz, el gas y el agua!

Estos pequeños consejos, que se repiten hasta la saciedad en numerosas páginas sensibilizadas con el medio ambiente, son por ejemplo:
- Por cada grado de temperatura que se baja la calefacción, se puede ahorrar hasta un 7% del consumo de energía. Según el IDAE, la calefacción a 21ºC es suficiente.
- En la cocina, si tenemos vitrocerámica apaguemos el fuego antes de terminar la cocción para aprovechar el calor residual.
- Apaguemos las luces de las habitaciones que no se estén usando.
- Una ducha supone un consumo medio de 45 litros de agua, mientras que un baño puede alcanzar los 145 litros.
- Cerrar el grifo mientras nos cepillamos los dientes, supone un ahorro de 19 litros.
- Debemos tirar de la cadena del inodoro sólo cuando sea necesario, evitemos utilizarlo como papelera o como cenicero, ahorraremos los 6 u 8 litros que contiene la cisterna.
- La lavadora y el lavavajillas consumen hasta 80 litros de agua, asegurémonos de que están bien llenos. De este modo, ahorraremos también energía. Además, debemos ponerlos a la menor temperatura posible, ya que alrededor del 80% de la energía que consume la lavadora se emplea en calentar el agua.

He seleccionado sólo algunos de ellos, los que desde mi punto de vista son más fáciles de poner en práctica en nuestras casas a diario, para recordarlos y que entre todos intentemos ponerlos en práctica. Que cada uno elija su motivo: para ahorrar en la factura, para cuidar el medio ambiente o por ambos, pero si cada uno intentamos hacer nuestros éstos consejos, conseguiremos grandes resultados con pequeños esfuerzos. Y como dice otra campaña de sensibilización ciudadana: cada gota cuenta.

Así que ya sabéis, ¡a ducharse en vez de bañarse y el lavavajillas y la lavadora bien llenos!

¿Podremos hacerlo? Espero que sí…